POR: IGNACIO SANTORO.
Había riesgo de perder, pero no. El Movimiento Popular Neuquino se presentó por primera vez en 1963: hace cincuenta y seis años que no sólo sobrevive, gana. La elección de ayer fue una muestra más de fuerza del partido que no perdió ninguna elección provincial desde el retorno democrático.
Neuquén es un caso atípico. Es la única provincia donde un partido provincial se mantiene en el poder durante un período tan prolongado de tiempo. Los partidos bajo el sello de “Movimiento Popular” proliferaron durante los tiempos de proscripción del peronismo y en su mayoría desaparecieron. No es el caso del MPN.
Esta elección se presentaba con varias particularidades que llamarón la atención de la política nacional. En primer lugar, Neuquén inauguró oficialmente el calendario electoral. Fue la primera provincia en elegir gobernador, y algunos se atrevieron a proyectarla como el primer campo de batalla hacia la elección nacional. Un error: Neuquén tiene una dinámica propia y la grieta no llegó. Por eso no es posible afirmar que ganó o perdió el Gobierno Nacional o el kirchnerismo; como Omar Gutiérrez sentenció en la conferencia de prensa: “Hoy no se eligió presidente”. En Neuquén pasó lo de siempre, ganó el MPN. Y el MPN juega para el MPN. Faltan otras 15 provincias que elegirán sus representantes antes de la disputa presidencial que podrán (o no) servir de termómetro nacional.
En segundo lugar, parecía una elección de alternancia. En la historia reciente la hegemonía del MPN se vio amenazada por dos frentes. Por un lado, en la última elección de diputados nacionales del 2017, Cambiemos había superado en votos al partido provincial. Sin embargo, las encuestas no favorecían al candidato de Cambiemos: Horacio “Pechi” Quiroga. Por otro lado, a quien beneficiaban las encuestas era al candidato de Unidad Ciudadana, Ramón Rioseco. Mucho se habló del posible recambio histórico y un triunfo kirchnerista que serviría de envión a la candidatura de Cristina Fernández de Kirchner —quien había apoyado a Rioseco— en la carrera presidencial. No pasó. Rioseco quedó cerca de 14 puntos por debajo del oficialismo provincial.
La tercera, cómo diría Homero Simpson: —¿Esta máquina está arreglada? Neuquén fue la tercera provincia en aplicar la Boleta Única Electrónica (BUE) en todo su territorio (Salta y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la utilizaron anteriormente). Nuevamente surgieron denuncias de manipulación de la herramienta de votación, donde al igual que Homero, electores decían haber optado por una lista y sin embargo en la boleta aparecía impreso el candidato de otro partido.
¿Fraude o manipulación? Varias ideas surgen como respuesta. Ante las denuncias, lo primero que cabe mencionar es que estas quedarán sujetas a peritajes por parte de la justicia. En segundo lugar, no es la intención de esta nota dar una opinión sobre la BUE. Sin embargo, ante tanto humo es necesario poner paños fríos y analizar la situación. Las maquinas denunciadas ante la Justicia Electoral por Unidad Ciudadana Frente Neuquino fueron 5 de las 1541 utilizadas en los comicios. Tomar una inferencia de una elección manipulada a partir de una cantidad de casos tan bajo, es, por lo menos, apresurado.
La Justicia Electoral dio una respuesta ante estas denuncias: permitió que en aquellos casos donde hubo disidencia entre la voluntad del elector y lo expresado en la boleta, el votante sea provisto de una nueva.
¿Estos problemas afectaron los resultados de la elección? Si bien es apresurado dar una respuesta y es necesario una auditoria de las máquinas, un primer termómetro para medir la magnitud de los inconvenientes se encuentra en observar si existieron cambios notables en el porcentaje histórico de votos. Los votos concentrados por la primera y segunda fuerza se muestran similares a desempeños pasados. Un segundo elemento a considerar son los votos nulos. Se supone que, si el elector pudo comprobar una disidencia entre su intención de voto y lo reflejado en el papel y que, por lo menos hasta el mediodía no se habilitó la posibilidad de que le sea entregada una nueva boleta, el número de votos nulos debería ser alto. Sin embargo, solo 163 votos (0,04%) fueron nulos, una cantidad extremadamente baja frente a los históricos números de la provincia. La última palabra la tiene la auditoria.
Hay mucho ruido, pero poca capacitación. La instrucción sobre cómo utilizar la nueva herramienta de votación fue —según varios medios de comunicación— escasa. La demora en la presentación de resultados provisorios (que se anunciarían a las 19 horas y se comunicaron a las 20) debido a la presencia de electores en los centros de votación, refleja una falta de formación del electorado. Esta falta de capacitación podría también coincidir con las denuncias hechas por algunos electores de “voté por X pero salió Y”. Error humano o de la máquina, nuevamente, será algo que la justicia deberá resolver.
Un bonus track. Omar Gutiérrez efectivamente hizo una “trampita”. El candidato oficialista, encabezaba 5 de las 13 listas que se presentaron, es decir que en casi el 40% de las boletas aparecía su figura, ocupando un lugar importante en la oferta. Estrategia legal sí, pero un poco desleal también.
Simulador de votación electrónica: https://neuquen.votar.com.ar/
POR: IGNACIO SANTORO // SENDERO ELEGANTE.
ARTE POR: ROCÍO PERSICO.