POR: JUAN MARTÍN BARREIRO
Octubre fue un mes movido e intenso para el mundo Boca y el presidente de la Nación Mauricio Macri. El club xeneize viene de perder la semifinal de la Copa Libertadores ante River, lo cual deja muy mal parado al oficialismo de cara a las elecciones de diciembre. Macri por su parte perdió la reelección presidencial la semana pasada ante el principal líder de la oposición Alberto Fernández. En ambos casos hay grandes posibilidades de un proceso de transición por lo que sería uno de los peores finales para Macri ya que, además de perder la presidencia, lo mismo puede suceder con su poder e influencia en el club que lo impulsó en la política. No obstante, ambas pueden ser vistas como derrotas dignas, ya que el actual presidente no sufrió una derrota tan abultada como decían las encuestas y Boca se fue con un triunfo en el partido de vuelta de las semifinales a pesar de ser eliminado. Ahora ante la victoria del kirchnerismo en las urnas, distintos medios partidarios y periodistas han corrido el rumor de una posible vuelta del líder PRO al club de la ribera. Aún está a tiempo para inscribirse como uno de los pretendientes a recuperar la identidad que tanto caracterizó a Boca durante años, ya que las elecciones xeneizes serán el 8 de diciembre y el plazo para formalizarse como candidato se extiende hasta 15 días antes de esa fecha (el 24 de noviembre).
¿Es factible el regreso de Macri a la presidencia de Boca? Y en ese caso, ¿podrá llevar al club de vuelta a la gloria eterna, a diferencia de su “discípulo”, Daniel Angelici?
¿Fin de la etapa Angelici?
Durante la gestión del “Tano” se han visto altos y bajos, aunque estos últimos años fueron un tanto destructivos para el presidente de Boca. Si bien cosechó títulos locales y trajo jugadores de gran renombre internacional como el italiano campeón del mundo Daniele De Rossi, Boca sufrió del éxito de su rival eterno bajo la dirección técnica de Marcelo Gallardo. River obtuvo innumerable cantidad de copas internacionales entre ellas, una Copa Sudamericana, tres recopas y dos Libertadores , y además eliminó a Boca en cinco ocasiones en duelos de eliminación directa —uno de ellos en la final de la Copa Libertadores disputada en Madrid—. Hace tan solo una semana, Boca tuvo la chance de eliminar a River del torneo de clubes más importante del continente y cortar con esta racha negativa. Hace años que Boca ansía obtener la séptima Libertadores, un éxito deportivo que podría darle más favoritismo al oficialismo, pero el resultado no fue el esperado y River eliminó otra vez al xeneize, un nuevo fracaso que da indicios del final de una etapa.
Además de no obtener los mejores resultados deportivos, la dirigencia de Boca acentuó su imagen negativa luego del posteo del lamentable video antes de la semifinal del martes frente a River: un clásico video motivacional que fue vapuleado por críticas debido a su consigna xenófoba e irrespetuosa en la que se afirmaba que los ídolos del club son argentinos “y no chilenos o uruguayos”; esto dañó aún más la imagen del espacio comandado por Angelici.
“Es complicado evaluar la era Angelici, porque si te basás solamente en los hechos deportivos, Boca en estos ocho años llegó dos veces a la final de la Libertadores, dos veces a semifinales de dicho campeonato y ganó tres torneos de los denominados largos, con lo cual deportivamente podemos decir que no fue malo, lo que pasa es que al comparar (la situación actual de Boca) con el mejor momento de la historia de River, el balance es negativo, pero injusto a la vez”, manifestó el periodista de La Nación Pablo Lisotto sobre la gestión del actual presidente de Boca. Asimismo, agregó: “Por otro lado, a nivel institucional Boca tiene una economía saneada, tiene muchos ingresos y lo han sabido manejar muy bien. Entonces, es muy complicado dar un fundamento sobre si su gestión fue buena o mala”
El 8 de diciembre los socios xeneizes elegirán al nuevo presidente del club y el candidato de Angelici será Christian Gribaudo, actual secretario general de Boca, exdiputado del PRO y funcionario de Vidal en la provincia de Buenos Aires. Entre los opositores se encuentran las duplas Jorge Ameal- Mario Pergolini, que se presentará por segunda vez consecutiva; José Beraldi-Rodolfo Ferrari (Beraldi acompañó a Mauricio Macri en la conducción del club desde 1995 hasta 2011 y Ferrari es ex vicepresidente de Angelici); Víctor Santa María- Santiago Carreras, presidente del PJ porteño y exdiputado de La Cámpora en Buenos Aires, respectivamente, como la extensión xeneize del Frente de Todos; y, aún sin definirse, una fórmula que sería comandada por César Martucci. Ameal y Pergolini son los opositores con mayores chances de ganar y proponen devolverle la identidad xeneize y resolver todos los problemas del club.
Tanto Ameal como Beraldi publicaron en sus redes sociales que se encuentran a favor del proyecto de ampliación de la Bombonera que contempla comprar dos medias manzanas que se ubican detrás de los palcos que dan a la calle Del Valle Iberlucea para cerrar el estadio. “Yo creo que la oposición no tiene una victoria tan clara, todo depende de cuantos se presentan, si hay dos listas es muy probable que gane pero si hay más de dos, las chances de una reelección por parte del oficialismo son más altas. Se tendrá que ver cuando se cierren las listas para saber cuántos candidatos hay”, expresó Lisotto sobre las probabilidades de un triunfo de la oposición.
¿El ídolo candidato?
Juan Román Riquelme es la imagen más representativa del mundo Boca, un ídolo histórico que siempre está vinculado con el club de alguna manera. Riquelme tendrá su despedida tan esperada el 12 de diciembre. Por meses, se habló de una posible candidatura de Román como dirigente de Boca y desde el círculo íntimo del ex futbolista deslizaron que tenía pensado postularse como presidente, aunque Riquelme nunca lo dio por sentado. Riquelme afirmó que todos los candidatos quieren que él los acompañe en las próximas elecciones. Pergolini ante esta situación expresó: “Si Riquelme quiere ir de vice, le doy mi lugar. Yo tengo muchas variantes para ayudar a Boca desde distintos lugares”.
Por ahora, el jugador no hizo ninguna declaración sobre cuál será la candidatura a la que apoyará. Sin dudas, cuando lo haga inclinará la balanza a favor del candidato que más lo seduzca. Una vez que se conozca ese dato, seguro se pueda pronosticar con mayor presición quién será el futuro presidente de Boca.